A veces lo que llega por casualidad nos hace más felices que lo que buscamos.
El éxito de la vida no está en vencer siempre, sino en no rendirse nunca.
Hay regalos que no cuestan nada pero son muy valiosos, como el amor, la amistad, el respeto y la honestidad.
La felicidad es darse cuenta de que nada es demasiado importante.
No dejes escapar a las personas que hacen bonito tu mundo.
Que la noche te regale los mejores sueños, y el día la oportunidad de hacerlos realidad.
Unos creen que la vida comienza a los 40, otros a los 50… , en realidad, la vida empieza cada mañana al despertar.
Aprendí que la vida es irónica, se necesita tristeza para saber que es la felicidad, ruido para apreciar el silencio y la ausencia para valorar la presencia.
No pierdas la bonita costumbre de pintar sonrisas en la vida de los demás.
Los abrazos se inventaron, para decir todo sin hablar.
Quien sabe lo que siembra… no teme lo que cosecha.
En la vida siempre encontramos personas que alumbran nuestro camino, a veces los llamamos Ángeles, otras Amigos.
Hay personas que te sueltan a medio camino, abandonándote a tu suerte. Y hay otras que te sujetan a medio camino, cambiándote la suerte… . A las segundas hay que aferrarse con fuerza, porque siempre quien llega sin llamarlo, termina siendo nuestra mejor compañía en el viaje de la vida.
La edad no es una barrera, es una limitación que pones en tu mente.
Lo que se aprende con babas, no se olvida con canas.
No busques errores, busca un remedio.
Si no pierdes, no puedes disfrutar de tus victorias.
Si la oportunidad no llama, construye una puerta.
Sólo aquellos que se arriesgan a caer pueden conseguir grandes cosas.
Si te enfocas en la herida, continuarás sufriendo. Si te enfocas en la lección, continuarás creciendo.